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Gobierno de José de Silva

- La derrota de Perugorría. Reacción artiguista

Mientras Genaro Perugorría y sus valientes soldados eran rodeados en los campos de Colodrero por las fuerzas del llamado “Ejército Auxiliador del Norte”, su Comandante General hacía avanzar hacia el Paraná, a adueñarse de la capital, a José de Silva, con autorización amplia para reunir la milicia armada.

El Manifiesto que en este sentido hizo público el Comandante General Blas Basualdo(1), establecía que nadie estaba exento del servicio militar sino por causa muy justa, estimulando el olvido de todos los resentimientos y rivalidades “que pueden causar sumo perjuicio”, y agregaba: “No nos mostremos hombres de un carácter privado; tengamos carácter público, que, unidos en una misma causa, seremos felices y haremos a nuestro país feliz”.

(1) Fechado el 19 de Diciembre de 1814, en el Batel. En el Archivo de la Provincia. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

Mientras Silva -haciendo reunión de gente miliciana- marchaba sobre la Ciudad de Corrientes, en ésta se habían producido novedades. Algunos lanchones federales artiguistas aparecidos frente a su Puerto y las noticias que llegaban sobre la situación de Perugorría decidieron al Alcalde de primer voto, Angel Fernández Blanco; al Alférez Real, J. José Blanco; al Alcalde Provincial, J. Ignacio Acosta; y al Procurador Síndico, Francisco de Paula Araujo -comprometidos en el movimiento- a huir el día 25 de Diciembre de 1814 con numerosas familias; otras se dispersaron por los bosques vecinos(2).

(2) Copiador de Gobierno. Oficio de Silva a Blas Basualdo, desde Corrientes, del 29 de Diciembre de 1814. Archivo de la Provincia. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

El resto de cabildantes que quedó en la ciudad -el Alcalde de segundo voto, Juan Bautista Flores; y los Regidores, José Ignacio Benítez y Pedro José Cabral- convocaron el día 25 a un cabildo abierto con asistencia de los prelados de los Conventos, del cura de San Luis del Palmar “y otros individuos de conocida probidad”(3), resolviendo designar Comandante General de Armas interino a Juan Bautista Méndez, continuando el Cabildo con sólo el Gobierno político.

(3) Oficio del Cabildo a los militares de a bordo; tal la dirección de la Nota. 26 de Diciembre de 1814. En el Archivo de la Provincia. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

- El Gobierno de José de Silva. Política liberal

El día 28 de Diciembre de 1814 penetraba en Corrientes José de Silva. El comandante interino Méndez reúne el cabildo abierto del 26 de Diciembre, y este Cuerpo reconoce -ante el Oficio que se le exhibe, de Basualdo(4)- “en carácter de Comandante General de Armas al Comandante de Milicias provinciales, don José de Silva”.

(4) Oficio en el Archivo de la provincia de Corrientes; Oficio de Silva a Basualdo, dando cuenta del suceso. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

Al día siguiente Silva recibía nuevos Oficios en que el comandante Basualdo lo nombraba gobernador de la provincia en cuyo carácter es también reconocido por el Cabildo desde que justamente llegaba la noticia de la rendición de Perugorría.

Con este motivo, y desde su campamento en el Batel, decía Basualdo:

“Sabrá Ud. cómo el 24 del corriente se rindieron las fuerzas del famoso Perugorría, sin más tratado que bajo de mi palabra de honor les librase la vida; es todo lo que le puedo a Ud. comunicar de nuevo; hoy le remito a Vd. lo que me pide; pórtese con energía y entusiasmo, que espero de Ud. como hombre sensato y verdadero ciudadano desempeñará lo mejor en lo que se le comisiona”(5).

(5) En el Archivo de la provincia de Corrientes. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

- Basualdo en Corrientes. Relato de Mantilla sobre los acontecimientos

Blas Basualdo entró en la capital el 1ro. de Enero de 1815 con 230 hombres de Antañazo; cuatro días había ocupado la ciudad el capitán José de Silva, nombrado por aquél Comandante General de la provincia.

José Gabriel Casco quedó en San Roque al mando de las demás fuerzas. “El vencedor era un bárbaro, indio de raza pura; por ser de baja estatura, le decían ‘Blasito’”, dirá Mantilla.

Los principales comprometidos huyeron tan luego como conocieron el desastre, pero casi todos fueron capturados, estropeados y remitidos trincados a Artigas,

* confiscándosele sus bienes(6);

(6) Angel Fernández Blanco, tomado a la altura del Empedrado en un buque de vela, hubo de ser fusilado; su hermano, el doctor José Vicente, compró su vida en 4.000 pesos al contado, que Basualdo pidió por ella. // Citado por Manuel Florencio Mantilla. “Crónica histórica de la provincia de Corrientes”.

* se premió a los soldados con el saqueo libre de la ciudad;
* se impuso contribución forzosa a los ricos, con más un fuerte rescate a muchos de ellos encarcelados;
* el Cabildo fue disuelto;
* asesinatos y ejecuciones a lanza eran frecuentes;
* el comandante José Ignacio Añasco -distinguido servidor de la patria- fue fusilado en la plaza de San Cosme;

"en síntesis: soez, brutal desenfreno imperó", sentencia el referido Mantilla.

El 6 de Enero de 1815 nombró Basualdo -de viva voz, en la plaza, ante el vecindario arrastrado a ella por sus soldados- gobernador intendente de la provincia a José de Silva, y éste expidió, el mismo día, un Bando según el cual estaba “investido de facultades omnímodas de Justicia, Política, Guerra y Hacienda”.

Constituido de esa suerte el Gobierno, se retiró Basualdo para incorporarse al Protector, dejando "partidas de sus hordas" en la campaña y, en clase de Comandante General de ella a José Gabriel Casco.

- Situación fundada por Basualdo

José de Silva "no era hombre malo ni desconocido"; sirvió con Manuel Belgrano a los fines de la campaña del Paraguay, en clase de jefe de uno de los escuadrones de milicias de caballería de Corrientes; hizo la primera campaña oriental en las filas del ejército porteño, y cuando las tropas de la revolución levantaron el sitio de Montevideo -en virtud de arreglos celebrados en 1811, por resolución del Gobierno porteño- pasó con sus fuerzas a depender la autoridad política y militar conferida en esa época al coronel José Gervasio Artigas.

“Carecía de instrucción, de prestigio, de fortuna; era personalmente inofensivo, sin ninguna inteligencia, de voluntad débil, ciego adicto de Artigas, dócil niño a las sugestiones de sus correligionarios. Presidió un cacicazgo, no un gobierno; fue admirable instrumento inconsciente, para la plenitud de la dominación ‘artiguista’” (7), dirá de él Mantilla

(7) El 30 de Enero de 1815 adoptó Silva el pabellón de Artigas. En Oficio de éste a aquél, lo describe sí: “Blanca en medio, azul en los dos extremos y, en medio de éstos, unos listones colorados, signo de la distinción de nuestra gran grandeza”. // Citado Manuel Florencio Mantilla. “Crónica histórica de la provincia de Corrientes”.

Por mandato del Protector, restableció el Cabildo que

“durante 1a triste y vergonzosa época desempeñó el mismo papel del Senado romano bajo Tiberio, Calígula y demás emperadores semejantes. Imperaba la arbitrariedad ilimitada; como dogma social se imponía la voluntad de Artigas; el terror dominaba a todos”.

Mientras Artigas enviaba al capitán Sandoval con veinte dragones para apoyar la autoridad del nuevo gobernante y solicitaba la preparación de alojamiento para él y sus fuerzas que ya estaban próximas al Riachuelo, muy distinta pinta la situación otro historiador correntino, Hernán Félix Gómez.

Este decía que en contra de lo que pudiera suponerse, José de Silva no se puso al servicio de una política de represalia ni ella le fue indicada por el vencedor.

En el Libro Copiador de Gobierno(8) obra una Nota que pasara el 31 de Diciembre de 1814 al Alcalde de primer voto Angel Fernández Blanco que -en vez de emigrar, como se dijo en el primer momento- se habría ocultado a la venganza de los invasores.

(8) En el Archivo de la provincia. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

Silva dice en esa Nota, especie de garantía que se daba al ex Alcalde:

“Vengo a recibirme de la plaza y a aquietar el movimiento que hubo, garantizándole que no tengo disposición contra nadie”. Fernández Blanco se presentó, dándosele la ciudad por cárcel bajo la fianza de tres personas que se obligaron por escritura(9) a responder de su existencia y comportamiento.

(9) Copiador de Gobierno. 1815. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

El día 7 de Enero de 1815 el gobernador Silva daba un Bando en que avisaba al vecindario que al día siguiente haría su entrada a la ciudad el coronel Blas Basualdo, ordenando que todos concurrieran a recibirlo pues llegaba con todas las tropas de su mando(10).

(10) En el Archivo de la provincia (Gómez y Mantilla difieren en la fecha de ingreso de Basualdo a Corrientes). // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

Y en efecto, una enorme concurrencia se congregó a homenajear al vencedor de Perugorría, cuyo espíritu de conciliación era conocido tanto por las Proclamas de Silva -que él inspirara- cuanto por las severas instrucciones que le diera(11) de mantener el sosiego público, de no permitir desórdenes, que hiciera renacer la tranquilidad “para que los vecinos vivan gustosos en sus hogares, privando el que las familias se dispersen errantes por influjo de los enemigos del sosiego general”.

(11) Cartas de Basualdo a Silva del 26 y 30 de Diciembre de 1814. En el Archivo de la provincia de Corrientes. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

Abundando en estos propósitos había escrito a Silva el mismo día que le comunicaba su victoria(12):

“... en el caso que se halle en la ciudad hará presente a ese vecindario por medio de carteles fijados en las esquinas que el modo de pensar de nuestro general, don José de Artigas, y su Comandante General don Blas Basualdo, es que ningún vecino desampare nuestra santa causa de la libertad, sino que se mantengan en sus casas tranquilos, cuidando de sus labores domésticos, sin temores ni recelo alguno por las opiniones cualesquiera que hubiesen seguido”.

Y agregaba:

“Tengo dadas mis órdenes a mis súbditos imponiendo la pena de vida al que robe al vecino o cometa algún desorden, como lo he verificado en el camino en que he hecho dos justicias”.

(12) El 29 de Diciembre de 1814. Ver Archivo de la provincia de Corrientes. Desde San Roque. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

Tan generosa actitud que cosechó a Basualdo calurosa ovación popular, fue extremada con la permanencia de un día en la ciudad capital. El 9 de Enero de 1815 se pone en movimiento y contramarcha a dominar la campaña y unirse con Artigas, evitando así los enormes perjuicios que irrogan los acantonamientos.

El Cabildo no pudo permanecer silencioso ante esta conducta y labró el día 9 de Enero un Acta que suscriben el gobernador Silva y los regidores Pedro José Cabral, J. B. Flores, Bartolomé Quiroga, J. J. Lagraña y Gaspar López, haciendo constar que el pueblo secundó al coronel Basualdo y que ni éste ni sus tropas habían irrogado daño alguno a la ciudad.

Antes de partir, Basualdo ratificó el nombramiento de Silva como gobernador quien, el 10 de Enero de 1815 escribía al general José Artigas asegurándole la sinceridad de la adhesión de Corrientes al sistema federal(13) y comunicándole -junto con el Cabildo- la corrección de las fuerzas que lo representaban.

(13) Copiador de Gobierno. Archivo de la provincia de Corrientes. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

Artigas contestaba:

“Acabo de recibir el testimonio autorizado con que ese Ilustre Ayuntamiento certifica no solamente el restablecimiento de la paz y de la unión sino la mejor comportación del jefe, oficiales y soldados de la División Auxiliadora.
“Yo felicito al pueblo en nombre de V. S. y a mí mismo por tan favorable resultado, para que todos se desengañen de los ardides con que la malicia desfigura los hechos para envolvernos en la confusión y hacernos más infelices.
“Yo celebraré que V. S., reconociendo el importante servicio que acaban de hacer mis tropas a la provincia de Corrientes dejándola en el pleno goce de sus derechos y en manos de sus hijos naturales, se desvele por su conservación y aumentación.
“Este es mi objeto por más que mis enemigos publiquen lo contrario. Yo acredito con los hechos lo que ellos no pueden ni con palabras”.

Pero hay algo todavía más característico de esta generosidad del general Artigas y sus tenientes para con los hombres afectos a Buenos Aires que fueran vencidos en el levantamiento de Perugorría.

Da esta Nota elocuente en la comunicación que pasara al gobernador Silva(14) desde su Cuartel en Arerunguá, y con respecto a los prisioneros tomados por Basualdo cuando la rendición de Perugorría, le dice:

“Los delincuentes han pagado su delito y los inocentes regresan a gozar de la tranquilidad de sus casas; después de un serio escrutinio sobre los oficiales que acompañaban al ciudadano Genaro Perugorría, he descubierto la malicia de éste y simplicidad de aquéllos, uno y otro pongo en conocimiento de Ud. para que estos infelices no sean incomodados ni aun degradados por un yerro eventual y los malvados escarmienten en adelante en la cabeza de aquel delincuente”.

(14) El 10 de Enero de 1815. En el Archivo de la provincia de Corrientes. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

Al mismo tiempo mandaba original de la sentencia condenatoria del 17 de Enero(15) del tenor siguiente:

“Por cuanto el ciudadano Genaro Perugorría ha faltado al juramento de fidelidad con que se obligó a sostener los derechos de la provincia de Corrientes; ha abusado de la confianza que deposité en su persona como Representante para velar sobre la felicidad de su pueblo y de toda la provincia; ha perturbado el orden comprometiendo a sus ciudadanos para volver sus armas contras sus hermanos los orientales, después de haberlos librado de la opresión y tiranía en que los había puesto Buenos Aires.
“Por tanto se declara reo de lesa patria, enemigo de su provincia y traidor a la libertad de los pueblos y se lo condena al último suplicio, y para su cumplimiento y ejecución la firmo en mi Cuartel, etc”.

(15) Se conserva en el Archivo de la provincia. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

El castigo de Perugorría -venido como representante de Artigas a organizar políticamente la provincia estableciendo su primer Congreso de 1814- era para la moral de entonces algo inevitable.

Su fusilamiento, dadas las prendas personales del patricio(16), repercutió dolorosamente en la opinión e incorporó su nombre a la lista de oro de sus héroes.

(16) Se ha sostenido que Perugorría fue sujeto a un feroz tormento antes de ser muerto en el campamento y por orden de Artigas. Al respecto, el Archivo sólo nos deparó el texto original de la condena y una carta de Artigas del 26 de Enero de 1815 en que, dirigiéndose al Sargento Mayor Juan Bautista Méndez, le dice que Perugorría antes de morir arengó a los soldados lo tomasen de ejemplo y fuesen fieles al sistema. En el Archivo de la provincia. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

Igual generosidad que con los oficiales rendidos en la acción de Colodrero, se tuvo con el alma del levantamiento, Angel Fernández Blanco, a quien también se inculpaba haber remitido a Buenos Aires, para sus tropas, tres remesas de fornituras de las cuales había escapado una(17).

(17) Angel Fernández Blanco era dueño de una curtiduría y fábrica. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

El Cabildo se había dirigido a fines de Enero al general Artigas(18) solicitándole instrucciones para juzgar a los culpables, y éste solicitó a Fernández Blanco. El afecto que se rendía a este vecino progresista puso en juego las más respetables influencias para obtener su perdón.

(18) Copiador de Gobierno. En el Archivo de la provincia. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

Escribió en este sentido a Artigas, el Sargento Mayor Juan Bautista Méndez al que contestó el general(19) pidiendo su remisión y estableciendo lo trataría con bondad.

(19) Carta del 26 de Enero de 1815. En el Archivo de la provincia. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

En ese concepto dice en su carta:

“No es mi ánimo derramar la sangre preciosa de los americanos, pero las circunstancias nos han estrechado de tal modo que debemos hacer respetable nuestra justicia si deseamos que ella triunfe.
“Esto mismo conoció el comandante Perugorría, y penetrado de su crimen, muy lejos de acobardarse en el último suplicio, lo confesó públicamente y animó a los soldados de la libertad para que siguiesen su sistema constantemente y escarmentasen en su persona para no ser infieles a su patria”.

El 4 de Febrero escribe Artigas otra vez en el mismo sentido, pero ya al gobernador Silva:

“Yo no firmaré su exterminio pero tampoco consentirá obstruya los pasos a realizar la libertad por la que tan dignamente se sacrifican los pueblos que la aman y veneran”.

Y agregaba: “Si en su concepto no son sanos estos principios, yo le franquearé el paso para que se una a los de su redil”.

El Oficio de Artigas fue recibido el 14 de Febrero por el gobernador Silva, quien el 16 hacía marchar a Fernández Blanco al Cuartel del general, bajo la custodia del alférez Carlos Pérez y de seis soldados.

Al comunicárselo(20) Silva se felicitaba de que, conforme a su carta, jamás sería sacrificada la vida del prisionero, confirmando la sinceridad de la adhesión de Corrientes al sistema federal.

(20) Copiador de Gobierno. Del 16 de Febrero de 1815. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

Artigas permitió a Angel Fernández Blanco volviera a Corrientes. En la Nota(21) que así lo hacía saber al gobernador Silva, expresaba lo tuviese a la mira por si daba algún motivo; agregaba:

“Lo encuentro adicto al sistema y al fin es un americano; además, que no he tenido un documento que acredite su mal procedimiento o si en algo ha delinquido para poderlo juzgar”. Por lo mismo, terminaba: “lo dejo a la disposición de V. S”.

(21) Del 27 de Julio 1815, desde Purificación. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

El mismo espíritu de contemporización revela haciendo regresar a Miguel Escobar, Francisco de Paula Araujo(22) y al doctor José Simón García de Cossio(23) acusados como partidarios de Buenos Aires.

(22) Carta de Artigas del 2 de Julio de 1815.
(23) Idem del 12 de Agosto de 1815. // Todo citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

Decía con este motivo: “En lo sucesivo procederé con igual rigor contra los delincuentes como contra los delatores que sin justificación ninguna acriminen la buena reputación de cualquier ciudadano".

Compleja la tarea que el comandante Basualdo dejaba a cargo del gobernador Silva, de organizar una Administración minada por la revuelta y la licencia.

Invocando órdenes del indicado jefe, habíanse organizado en el Interior de la Provincia numerosas partidas, que a título de perseguir a los desertores y dispersos de las fuerzas de Perugorría cometían toda clase de excesos en los vecindarios rurales.

El desorden llegó a tal extremo, que en Febrero de 1815 una partida al mando de Ramón Mena fue capturada, y ante la actitud del gobernador Silva se alzó, ocupó el Partido de las Ensenadas y estableció su cuartel en San Cosme. Costó trabajo reprimir estos bandoleros encubiertos, tarea posible porque el comandante Basualdo dispuso que estas partidas, para ser legales, debían llevar pase suscripto únicamente con su firma.

No menores dificultades surgieron del hecho de que Corrientes quedase dentro de la Comandancia General de Entre Ríos, que ejercía Basualdo, quien injertaba sus órdenes en el mecanismo político de la provincia. Bastaba que el gobernador Silva adoptase alguna medida contra familiares de Basualdo, para que éste ordenase la reposición del orden de cosas.

Tal pasó, por ejemplo, el 13 de Febrero, con su orden a Silva, desde Mandisoví, de que perentoriamente repusiera al Alcalde de San Roque, Ponce de León. Además y como procedimiento para atar a la ciudad capital, se había dado al Comisionado Militar de San Roque una jurisdicción amplia sobre la campaña y puerto de Goya, Yaguareté Cora y demás Partidos de la banda oeste del río Santa Lucía.

Produjo esto choque de órdenes e intereses, decidiendo al gobernador Silva a solicitar de Artigas los Partidos dependiesen directamente de la capital.

El nuevo orden de cosas quería congratularse con el pueblo, lo que busca restableciendo las fiestas religiosas, entonces de grandes proporciones, del patrono San Juan y los vicepatronos San Roque, San Sebastián y María de las Mercedes.

En lo que hace a las de La Cruz, el Bando indicaba(24) que la fiesta de la fundación se hiciera la víspera y antevíspera del Domingo de Ramos.

(24) Bando del 17 de Enero de 1815. En el Archivo de la provincia. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

En el mismo orden de cosas, el P. E. erigió una Parroquia en el vecindario de San Antonio de Mburucuyá, que hasta entonces dependiera de Saladas. El cura de este punto, doctor Cabral, se opuso, por lo que el nombrado para la recién erigida indica a Silva que la creación de parroquias debía gestionarse del obispado, y que en el ínter él quedaría con el doctor Cabral como teniente cura.

También afirmó su arraigo popular haciendo que el Gobierno de los pueblos de indígenas cayese en manos de naturales. Al efecto se hizo nueva elección en el pueblo de Santa Lucía, designándose un Alcalde de 1er. voto; uno de 2do.; un Alférez de la Patria; y un Secretario, que se organizaron en Cabildo dependiente del Gobierno de Corrientes(25), renovación de autoridades que se duplica en la comunidad de Itatí(26) pero con asistencia del gobernador Silva, que solemniza el acto.

(25) Disposición tomada por Blas Basualdo. Archivo de la provincia.
(26) El 6 de Junio de 1815. // Todo citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

Se removieron al Administrador y al Comandante Militar, nombrándose a naturales, los que en sesión del 9 de Junio de 1815 producen una nota simpática: nombran maestro de escuela a Mariano Cabañas, con dos pesos mensuales de sueldo para enseñar primeras letras a los niños del pueblo...(27).

(27) Comunicación en el Archivo de la provincia. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

Otra de las medidas simpáticas a la opinión fue el Bando(28) disponiendo que los derechos eclesiásticos se ajustasen al arancel sancionado por el Congreso de 1814, y que se pudiesen abonar en efectos y productos de la tierra.

(28) Del 2 de Febrero de 1815. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

- El comercio y la Administración

El gobernador Silva antes que a las órdenes incondicionales de Artigas, estuvo a la de los intereses positivos de la provincia. Tomando la iniciativa, prohibió por Bando del 2 de Febrero la extracción de ganado vacuno hembraje, como la venta de becerros, que disminuía el stock disponible, tan necesario para el mantenimiento del pueblo y como recurso de guerra.

El interés general de Corrientes coincidía con el de Artigas, que cuidaba del rodeo correntino porque garatizaba la subsistencia de sus tropas, que reclamaban de todas partes el envío de ganado.

Una de las más exigentes fueron las tropas del ejército guaraní de Andrés Artigas. Síntesis de esta política de protección del hembraje es el Bando del 5 de Marzo(29) en que el gobernador Silva, al confirmar el anterior, establece bajo las instrucciones de Artigas un impuesto de dos reales por cabeza de machaje vacuno y caballar, que no podía salir sin abonar ese impuesto, y sin el permiso correspondiente de los Comandantes Militares y penas de decomiso, etc, en sus infracciones.

(29) De 1815. En el Archivo de la provincia. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

La licencia y el parcialismo llevan a algunos Comandantes a permitir extracciones sin el pago del impuesto, que producen reclamos del Gobierno. Hay una(30) realmente sugerente, en que el gobernador Silva, dirigiéndose al comandante de San Roque, establece que esos permisos son privativos del Gobierno, y que en todo caso la extracción no podía hacerse sin pagar el impuesto.

(30) De Febrero 22 de 1815. En el Archivo de la provincia. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

Se trataba de un permiso ejecutoriado por orden directa del general Artigas. También el Gobierno se preocupó del comercio de cueros, reduciendo(31) provisionalmente por elevados los impuestos que gravaban su extracción.

(31) Bando del 5 de Mayo. Disminuye el impuesto a medio real cada cuatro cueros que se exportaran.  // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

Esas medidas eran de absoluta necesidad. El general Artigas, a raíz del triunfo sobre Perugorría, había dispuesto el cierre de los puertos para el comercio de Buenos Aires, medida que protestó el Cabildo y el propio gobernador Silva.

Este último, pasando sobre instrucciones dejadas por el comandante Basualdo, exigía del Comandante Militar de la plaza y puerto de Goya permitiese la navegación de los buques, quien expresaba cumplía esa orden pero haciéndolo responsable de su ejecución ante las expresas Instrucciones en su poder(32).

(32) Oficio del Comandante Militar de Goya, C. Fernández, del 20 de Febrero. En el Archivo de la provincia   // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

El general Artigas protestaba contra esta actitud de Corrientes. En su carta al gobernador Silva -ya citada- del 4 de Febrero, llamábale la atención sobre los cinco años de aislamiento y miseria que llevaban sufridos los pueblos de la provincia oriental, sacrificio que debía servir de ejemplo, agregaba, “a los pueblos amantes de la libertad”.

La decisión correntina era tan firme, que el general Artigas la admitió remitiendo(33) “dos Instrucciones dirigidas a facilitar el comercio hasta hoy estancado: una, relativa a los buques detenidos hasta hoy por mi orden y, la otra, referente a los que hayan de traficar en lo sucesivo, en la inteligencia que a esos derechos quedan sujetos paraguayos, ingleses, españoles, portugueses y cuántos no estén legítimamente munidos del pabellón de la libertad”.

(33) 1 de Abril 1815. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

Establecía un derecho de un real de exportación por cuero o arroba de grasa o sebo y un impuesto uniforme del 6 % a los efectos de ultramar y del 1 % a los de tierra. Fundábase esta medida en que se uniformaron voluntades entre “algunos pueblos occidentales y todos los orientales”(34), lo que hacía posible la actividad comercial.

(34) El 24 de Marzo de 1815 había sido despuesto el gobernador de Santa Fe, general Eustaquio Díaz Vélez. De esa fecha, a la derrota del general Ramírez el 10 de Julio de 1821 -en San Francisco de Córdoba- Santa Fe estuvo bajo la guerra llamada de los 7 años. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

El corso en el Paraná. El pabellón artiguista

Tampoco faltó al gobernador Silva preocupaciones de orden político y militar. La victoria sobre Perugorría tuvo la virtud de enconar la guerra que traía Buenos Aires a Entre Ríos, constatándose por planes interceptados(35) que la primera se disponía a fusilar a los jefes y oficiales que sus tropas tomasen prisioneros, para dominar por el terror.

(35) Oficio de Silva a B. Basualdo del 24 de Enero de 1815. Libro Copiador de Gobierno. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

A ello contestó Corrientes, armando dos corsarios y levantando la bandera de la Federación. La bandera levantada fue “la azul y blanca y roja”. Lo dispuso el coronel Basualdo, desde su Cuartel en Saladas, el 17 de Enero(36) y mientras continuaba su retirada, como un homenaje a la victoria obtenida por las fuerzas artiguistas el 11 de Enero de ese año.

(36) Oficio a Silva. En el Archivo de la provincia.  // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

Con fecha 30 del mismo mes, el gobernador Silva le contestaba:

“Quedo enterado de la voluntad del Señor General, que en los pueblos orientales se fije la bandera tricolor, blanca, azul y colorada, para distinguirse de Buenos Aires, la que debe tremolarse también en medio de los ejércitos, para que todo el mundo se desengañe y sepa lo que defendemos, cuya disposición circulé a los pueblos de mi mando”(37).

(37) Copiador de Gobierno. En el Archivo de la provincia. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

En su carta del 4 de Febrero ya citada, el general Artigas duplicaba estas instrucciones a Silva, quien el 8 de Marzo de 1815 avisaba haber enarbolado la enseña, blanca en el centro, azul a los costados y con listones rojos en medio de estas franjas azules.

En cuanto a los dos buques corsarios que debían armarse en el puerto de la capital, se botaron el día 19 de Enero de 1815 sufriendo la rotura de los palos, pero son inmediatamente compuestos. Bien municionados, con abundantes víveres y con una tripulación tomada de los marineros y pescadores del puerto, que debía llevarlos hasta Goya, se ponen en movimiento bajo las órdenes del comandante Luis Lanche, y el comisariato del doctor Manuel Cañas de Santa Cruz.

Bueno es consignar que las autoridades de Corrientes retardaron dar a estos corsarios la tripulación que pedían, que recién el 3 de Febrero de 1815 ordenaron al Sargento Mayor Juan Bautista Méndez la tomase de la rivera y entregase, con el propósito probable de dar tiempo a que los barcos que habían salido con efectos de la provincia escapasen a una presumible persecución.

Así aparece de los Oficios en que Lanche y Cañas urgían la entrega de marineros. Pudo, a su vez, deberse la mora a la necesidad de esperar órdenes de Artigas(38).

(38) Dice el gobernador Silva a Artigas el 11 de Febrero e 1815: “Los corsarios navegaron de aquí al destino de La Bajada ... a cargo de sus Comandantes, a quienes entregué en mano propia las órdenes de V. E.” Copiador de Gobierno. Los Oficios con que se urgía la entrega de marineros son del 1 de Febrero de 1815; solicitaban se llamase por Bando a los voluntarios, porque en su defecto se tomarían otras providencias. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

Bueno es antes de pasar adelante abundar en la obra de estos buques corsarios, que estableciendo su Cuartel General en Goya, hacían el control efectivo de la navegación del Paraná.

Obvio es que una parte de las presas de los corsarios pertenece al Estado, y que la determinación del importe de la presa se efectúa con los manifiestos de carga y documentos en general del buque.

El Cabildo de Corrientes, a quien correspondía vigilar los intereses del Estado, llamó la atención del general Artigas sobre serias irregularidades, reclamando del comisario, doctor Cañas de Santa Cruz, una prolija rendición de cuentas.

No bien llegado Artigas al Paraná(39) se dio cuenta de que el comandante L. Lanche, de los corsarios, procedía irregularmente, por lo que le hizo colocar una barra de grillos. Lanche declaró que los efectos sa­cados ilícitamente de los barcos los había dejado en Goya en poder de su comisario, el doctor Cañas de Santa Cruz quien, conminado por su parte por el Cabildo, se negaba a rendirle cuentas en un amplio Memorial del 7 de Abril(40), esperando órdenes de Artigas y protestando en su nombre.

(39) Carta al Cabildo correntino desde ese punto. 1 de Abril de 1815. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.
(40) En el Archivo de la provincia // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

Sin conocer esta incidencia, Artigas ordenaba al Cabildo se ocupara del asunto, como lo hizo, especializándose con la presa del bergantín “Pájaro”, de la que el doctor Cañas de Santa Cruz alzóse con cinco mil y pico de pesos, dando cuenta sólo de la inversión de $ 1.700.

En posesión de estos datos(41), Artigas indicaba al gobernador se terminase el sumario, condenándose al doctor Cañas de Santa Cruz a un destierro de dos años en algún pueblo del Interior de la provincia.

(41) Carta de Artigas a Silva del 6 de Julio de 1815. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

La actitud del Gobierno de Silva en lo que respecta al sistema federal fue clara y concluyente desde el primer día. La generosidad de que se hizo gala con los vencidos por parte del coronel Basualdo fue orientada en el sentido de producir el destierro o alejamiento voluntario de la provincia de todos los ciudadanos no conformes con el régimen imperante.

En ese sentido, el 7 de Febrero de 1815 el gobernador Silva dio un Bando concediendo un plazo de diez días para que los comprendidos en él presentasen un Memorial expositivo, contra el cual se les daría el pase necesario.

Contemplaciones recíprocas y el retiro inmediato de Basualdo, quitaron trascendencia a la disposición, por lo que éste la duplica el 14 de Marzo, desde su Cuartel de Concepción del Uruguay, caracterizando que todo ciudadano que no atendiese la indicación de abandonar Corrientes, y a quien des­pués se descubriera relaciones o simpatías con los enemigos, debía atenerse a las consecuencias...

También se ordenaba la recolección de armas de fuego, bajo penas severas.

Paralelamente, el 25 de Marzo de 1815, enviaba el general Artigas una orden al coronel Basualdo para su aplicación en todos los pueblos de su mando. Disponía(42) que conviniendo a la seguridad del territorio como a la transacción de los asuntos políticos, que ningún español que no fuese desertor de las tropas de Buenos Aires permaneciese en el territorio de su mando, ordenaba fuesen embarcados para Buenos Aires, bajo pena de ser castigados a su arbitrio y de perder sus bienes.

(42) Archivo de la Provincia. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

El Cabildo de Corrientes objetó la orden y Artigas la reiteró. Decíale: “Las órdenes generales ni siempre suponen delito ni arguyen conveniencia y por eso deben cumplirse a pesar de aparentes contradicciones”.

Por otra parte, afirmando la obra nacionalista que existía en el fondo de esta disposición, el 1 de Mayo el coronel Basualdo ordenaba al Gobierno diese un decreto disponiendo ningún extranjero tendría empleo concejil ni en los ramos de la Administración, la Hacienda, etc., que reportara utilidad.

Y agregaba: “Estos cargos deben darse a los americanos”. Artigas el 3 de Mayo reiteraba al Cabildo la orden aludida encomiando el Gobierno de los pueblos de indios por autoridades indígenas.

No obstante la reiteración, el gobernador Silva no cumplió en toda su amplitud la expulsión de españoles, por lo que Artigas le decía(43):

“Quedo enterado de su exposición sobre los extranjeros. Vd. me dice han salido los malos y Dios quiera haya Vd. encontrado los bue­nos; lo que sí aseguro a Vd. es que expone su opinión a la censura de los paisanos. Mi providencia no ha sido conminativa sino preservativa de los males. Yo bien sé de los resultados de cualquier condescendencia en esta parte, y des­pués de haberlos sacado de todas las demás provincias, no es regular que sea esa privilegiada...".

(43) Carta del 6 de Julio. Archivo de la provincia. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

En medio de esta tarea de organización(44) repercutieron auspiciosamente en Corrientes los movimientos autonómicos de los pueblos del Alto y Bajo Perú, consignando sus congratulaciones el Cabildo en sus Actas, como el triunfo de Arenales, el embarque de las fuerzas desde Chile al Perú, la liberación de Santa Fe del poder de Buenos Aires, etc., que el coronel Basualdo comunicaba(45) caracterizando en vistas generales la importancia y trascendencia del momento histórico.

(44) El gobernador Silva tomó numerosas e importantes iniciativas. El 2 de Febrero de 1815 suprimió el Tribunal de Concordia, de tres vocales, establecido por el Gobierno de Buenos Aires, dejando los asuntos a los Juzgados de Justicia; el 20 de Febrero de 1815 ordena la disolución de la Junta Municipal que atendía la Hacienda, etc. Vigiló -asimismo- la percepción de la Renta pública y particular del Estado, que comprendía la alcabala de tierra, otras tesorerías, pulperías y producto de cruzada, papel sellado, tributos, novenos, guías y productos de boletos, inválidos, montepío militar, vacantes eclesiásticas y renta de naipes, respectivamente.
(45) El 31 de Mayo de 1815// Todo citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”
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Días antes, el 5 de Marzo de 1815, Silva había hecho conocer al pueblo, en Bando, que el ejército de José Rondeau se había declarado por el sistema, enfrentándose a Alvear, sucesos todos que parecieron prometer días de tranquilidad a la provincia.

No obstante tan gratas informaciones, Corrientes no suspendió sus preparativos militares. Los temores de una gran invasión de fuerzas españolas que vendrían de la Península, y más que todo la actividad de los portugueses, que exigían la protección de la frontera en la costa del Uruguay(46), llevaron al gobernador Silva a disponer la organización de la milicia provincial.

(46) Cartas de Artigas al gobernador Silva del 1 Junio de 1815. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

El plan lo envió Artigas. Tratábase de que cada pueblo y Partido organizase una sección, todas las cuales dependerían de un regimiento a crearse en la capital con el nombre de Milicias Urbanas de Corrientes.

A falta de armas de fuego debían organizarse con lanzas, produciéndose para custodiar la capital una rotación de las compañías de los Partidos. Para sufragar los Gastos y la compra de armas, destinaba Artigas dos partes de las que se habían reservado del producido de las presas de guerra. No convenía a la capital este procedimiento.

La milicia departamental -que a veces la custodiaba- era famosa por abusos y licencias de todo género, por las fuertes sumas que demandaba de la Hacienda del Estado, inconducta que no sólo pesaba sobre el vecindario sino sobre la campaña rural que la milicia recorría al venir y al retornar a su destino.

El Cabildo encontró la clave. Pedir las armas de fuego que existían en los pueblos rurales para armar a sus vecinos y desarmar las temibles partidas. Y claro, como lo pensó lo hizo, destinando el tanto de las presas de guerra para las obras de las casas consistoriales...

Artigas protestó. Alarmado por la recolección de armas, no sólo pide al Cabildo recapacite, sino se dirige en Circular a los Comandantes Militares de los Partidos, expresándoles no enviaran las armas sino soldados armados y, en lo que hace a los caudales también reclama, pues era restar a la clase militar una ayuda necesaria que lo congraciaba con el elemento militar(47).

(47) Cartas del 6 de Julio de 1815, etc. // Citado por Hernán Félix Gómez. “Historia de la provincia de Corrientes (desde la Revolución de Mayo hasta el Tratado del Cuadrilátero)”.

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