Cuyo, el Tucumán y el Río de la Plata son incluidos en el Virreinato del Perú
Desde la expedición con que Pedro de Mendoza inició la conquista española en las regiones llamadas del “Río de la Plata”(1),
(1) Las noticias que la expedición de Caboto llevó a España, dieron fama a las riquezas del Río de la Plata, despertando la codicia de muchos, pues lo que movía entonces a los emprendedores, era el anhelo de enriquecer por el despojo, y no el deseo de poblar y trabajar. Carlos V dio a su servidor Pedro de Mendoza, “noble corrompido y cruel” -al decir de Mantilla-, la conquista y la “exploración de la ponderada región”, titulándole “Adelantado y Gobernador General”. La expedición fue numerosa y bien provista de todo; salió de Sanlúcar, el 24 de Agosto de 1535 y llegó a su destino, al principiar el año 1536. Mendoza fracasó; su delegado, Juan de Ayolas, sucumbió en una exploración hacía el Perú. El capitán Domingo Martínez de Irala concentró entonces, los restos de la expedición, en el Paraguay.
el rey confería el Gobierno de aquélla por capitulaciones(2),
(2) Las condiciones impuestas por el soberano y los derechos que otorgaba.
y con el título de Adelantado(3),
(3) “Lo que, en el régimen español antiguo, se llamaba un Adelantado, es exactamente igual a lo que se llamaba Sátrapa en el régimen antiguo de los persas”. Vicente Fidel López. Manual de la Historia Argentina.
o lo confiaba provisionalmente su representante superior en el Perú, sin las mencionadas restricciones y jerarquía; el Adelantazgo era hereditario.
El proceso histórico demostrará que el mando fue, sin embargo, ejercido más por delegados, que por las personas a quienes correspondía; Pedro de Mendoza, Alvar Núñez Cabeza de Vaca(4),
(4) Segundo Adelantado. El delegado, Domingo Martínez de Irala, lo derrocó y lo remitió a España.
Juan de Sanabria(5),
(5) Tercer Adelantado. Murió antes de ocupar el Gobierno; también murió en las mismas condiciones su heredero, Diego de Sanabria.
luego Juan Ortiz de Zárate(6),
(6) Cuarto Adelantado. Vino al Río de la Plata con soldados, familias y muchos elementos para el cultivo de las tierras y la cría de ganado. No fue feliz en sus empresas de población, ni gozó de prestigio, ni su autoridad mereció acatamiento cumplido.
poco significaron como factores directos de la conquista en su relación a Domingo Martínez de Irala, los delegados que siguieron a éste, Felipe de Cáceres y Juan de Garay.
Lo mismo ocurrirá durante el período del último Adelantado, el licenciado Juan de Torres de Vera y Aragón, de noble estirpe peninsular, ilustrado, Oidor que fue de la Audiencia de Charcas, y antes bien reputado gobernante en Chile.
Fundamentalmente por esta situación, las después provincias argentinas de Cuyo, del Tucumán y del Río de la Plata -incorporadas inicialmente a la jurisdicción de las Audiencias de Concepción y de Charcas-, serán territorios incluidos en el Virreinato del Perú, desde la real cédula del 15 de Febrero de 1567, sin perjuicio de que continuase por algún tiempo, en el Río de la Plata, el régimen de adelantamiento y las ocasionales elecciones de gobernadores locales en su mismo distrito.
Dicha dependencia del Virrey del Perú se mantendrá vigente hasta la creación del Virreinato del Río de la Plata, en 1776.