Nombramiento de un Triunvirato en la Capital. Lagraña durante la ocupación paraguaya

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La Guerra de la Triple Alianza contra el Paraguay no solamente fue la más cruel y sangrienta de América del Sur, donde sus consecuencias modificaron el mapa jurisdiccional de demarcación entre Argentina, Brasil y Paraguay, sino también repercutió fuertemente en la política interna de los Estados participantes₍₁₎.

(1) Material cuyo autor es el doctor Dardo Ramírez Braschi. Profesor titular de Historia Constitucional Argentina de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales y Políticas (U.N.N.E.). Publicado en Folia Histórica del Nordeste. Instituto de Investigaciones de Geohistóricas. CONICET.

Si bien son numerosos los hechos y acontecimientos que nutrieron la Triple Alianza y los factores que llevaron a un enfrentamiento bélico contra el Paraguay, fue para la República Argentina el ataque y la ocupación al territorio de la provincia de Corrientes la firme razón para que el Gobierno del presidente Bartolomé Mitre justifique el ingreso a la contienda.

Si bien el país todo se consternó por este hecho, fue la provincia de Corrientes en donde la guerra tuvo dimensiones verdaderamente gigantescas. En los primeros meses de la guerra su territorio se constituyó en campo de batalla y, después del abandono de las tropas paraguayas, pasó a ser campo de reabastecimiento de los Ejércitos aliados.

La importancia de Corrientes radicaba en su ubicación geográfica y su valor estratégico. Así, el río que servía para llegar a Asunción, bañaba gran parte de la costa correntina; los pasos de cruce del Paraná estaban en ella, y todo su territorio norte limitaba con el frente de guerra, dándole estos aspectos una importancia geoestratégica trascendente.

MANUEL IGNACIO LAGRAÑA Gobernador de la provincia de Corrientes durante la ocupación paraguaya.

Con la ocupación paraguaya en un gran porcentaje del territorio provincial, hizo que las autoridades correntinas abandonasen la capital y se trasladasen a distintos puntos del Interior provincial. El gobernador Manuel Ignacio Lagraña continuó con el ejercicio del mando político en una situación de guerra.

Este Gobierno ha tenido características propias, por la situación reinante y por el rumbo que tomó el curso de la guerra.

- Desarrollo de los acontecimientos

Después de la batalla de Pavón, la primera gran consecuencia directa en la provincia de Corrientes fue la insurgencia que estalló a fines de Noviembre de 1861 contra el gobernador José María Rolón, quien renunció para dar lugar a los rebeldes liberales que coincidían con la política del general Bartolomé Mitre.

Tiempo después, fruto de aquella política, fue electo Lagraña gobernador de la provincia, asumiendo el 28 de Diciembre de 1862. De los tres años que legalmente duró su Administración, el tercero fue el más convulsionado, como consecuencia de los acontecimientos políticos y bélicos sucedidos por la invasión paraguaya a la Argentina.

La ocupación efectiva de las fuerzas militares paraguayas a la provincia de Corrientes en el año 1865 fue el hecho definitivo que impulso al Gobierno de Mitre a participar directamente en contra del Paraguay, además de que la firma del Tratado de la Triple Alianza así comprometía a los firmantes.

Con la guerra se produjeron significativos cambios políticos e institucionales en Corrientes. Tanto es así que, promovido por las autoridades militares paraguayas, los vecinos de la Capital crean y eligen un Poder Ejecutivo colegiado, compuesto por tres miembros oriundos de la provincia: Víctor Silvero, Teodoro Gauna y Sinforoso Cáceres.

La eleccion se realizó el 19 de Abril de 1865, siendo el resultado final del escrutinio el siguiente:

(2) Archivo General de la Provincia de Corrientes. Expedientes Administrativos. Legajo 144. Enero-Diciembre de 1865. // Citado por el doctor Dardo Ramírez Braschi. Profesor Titular de “Historia Constitucional Argentina” de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales y Políticas (U.N.N.E.). Publicado en “Folia Histórica del Nordeste”. Instituto de Investigaciones Geohistóricas. CONICET.

De los 112 vecinos que votaron, cada uno elegía con su voto a tres personas conjuntamente para conformar el Triunvirato. Entre los participantes de ese escrutinio estuvieron conocidos ciudadanos de la ciudad capital, entre los que podemos citar a Manuel Antonio Ferré y Nicolás Ferré, hermano y sobrino del ex gobernador Pedro Ferré; Pedro Rolón, hermano del ex gobernador José María Rolón; Cayetano Virasoro, hermano del ex gobernador Benjamin Virasoro; Manuel S. Mantilla, tío del historiador y político Manuel Florencio Mantilla, entre otros₍₃₎.

(3) Dardo Ramírez Braschi. “La Guerra de la Triple Alianza a través de los Periódicos Correntinos. (1865-1870)”. Corrientes. Año 2000. Ed. Moglia S. R. L. // Citado por el doctor Dardo Ramírez Braschi. Profesor Titular de “Historia Constitucional Argentina” de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales y Políticas (U.N.N.E.). Publicado en “Folia Histórica del Nordeste”. Instituto de Investigaciones Geohistóricas. CONICET.

Al principio, la ocupación paraguaya sobre el territorio correntino se dispersó rápidamente y llegó a tener efectiva jurisdiccion sobre los Departamentos Lomas, San Miguel, San Luis del Palmar, Mburucuyá, Caá Catí, San Cosme, Itatí, Empedrado y Bella Vista.

Las autoridades constituidas legalmente -con anterioridad a la ocupación- a cuyo frente se hallaba el gobernador Lagraña, con la noticia previa de la ocupación paraguaya, se retiraron de la capital, para instalarse -provisoriamente- en distintos poblados del Interior provincial en donde fueron fijando la sede de su Gobierno de campaña, siendo también punto de apoyo de toda resistencia militar.

Si bien se afirma genéricamente que el gobernador ejerció su Administración desde el poblado de San Roque, en los hechos lo hizo desde distintos puntos, como lo veremos más adelante.

La documentación referente al Gobierno de Lagraña durante la ocupación paraguaya está dispersa, ya que no se la pudo conservar uniformemente ni publicar ordenadamente en el Registro Oficial de la Provincia de Corrientes. Este Registro publica la última disposición el 21 de Abril de 1865 y, recién en fecha 31 de Octubre, vuelven a publicarse los decretos del gobernador, quedando un vacío de seis meses en aquella publicación oficial.

Así, encontramos su correspondencia y disposiciones publicadas en el Archivo Mitre, en el archivo del doctor Marcos Paz, en algunas publicaciones en el periódico correntino de tendencia paraguayista, “El Independiente”, Sección Correspondencia Oficial del Archivo General de la Nación, entre otros.

En el Archivo General de la Provincia de Corrientes son escasos los papeles reunidos del Gobierno de campaña de Lagraña. En otra investigación se ha hecho referencia a la actividad política e institucional que, paralelamente, desarrolló la Junta Gubernativa paraguayista, por lo que en esta oportunidad sólo nos referiremos al desempeño de la Administración del gobernador Lagraña₍₄₎.

(4) Dardo Ramírez Braschi. “La Guerra de la Triple Alianza a través de los Periódicos Correntinos. (1865-1870)”. Corrientes. Año 2000. // Citado por el doctor Dardo Ramírez Braschi. Profesor Titular de “Historia Constitucional Argentina” de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales y Políticas (U.N.N.E.). Publicado en “Folia Histórica del Nordeste”. Instituto de Investigaciones Geohistóricas. CONICET.

La fuerza militar y el poder de ocupación paraguayos dieron el respaldo suficiente para que el Gobierno elegido por los vecinos de la Capital pudiese -por algunos meses- ejercer disposiciones gubernamentales.

Desde la instalación de la Junta y el traslado de Lagraña al Interior de la provincia, entre los meses de Abril y Octubre de 1865, se desempeñaron en Corrientes dos Gobiernos paralelos, con dominio efectivo sobre distintos sectores del territorio correntino.

La imposibilidad de enfrentar tamaña fuerza de ocupación, hizo que Lagraña -junto a funcionarios y algunos batallones que improvisadamente pudo organizar- abandone la Capital el 13 de Abril de 1865, dejando atrás un considerable territorio, que abarcaba el Noroeste provincial, al dominio paraguayo.

Ubicado -provisoriamente- primero, en Empedrado y, luego, en San Roque, inició un fluido intercambio de correspondencia con las autoridades del Gobierno nacional, más específicamente con el presidente Bartolomé Mitre.

La primera de ellas, fechada el mismo 13 de Abril, a las 19:00, desde la capital y transmitido por el vapor inglés “Flying Fish”, comunicaba el ataque paraguayo a la Ciudad de Corrientes y detallaba los acontecimientos.

Desde Empedrado también enviará Informes al Gobierno Nacional, permaneciendo en este poblado muy poco tiempo. De ahí en más, la correspondencia fechada en los meses de Abril y Mayo, fue enviada y recibida desde el poblado de San Roque, donde el gobernador se instaló momentáneamente.

La alarma de la ocupación se difundió rápidamente por todo el país, y los aprestos no demoraron en comenzar ya que, el 17 de Abril, J. A. Gelly y Obes ordenaba una división de 3.000 hombres y cuatro buques con destino a Corrientes.

Una de las primeras órdenes de Lagraña fue convocar a la Guardia Nacional de todos los Departamentos de la Provincia, para que se concentren en San Roque. Sólo se mantuvieron en sus Departamentos las tropas de Santo Tomé, La Cruz y Paso de los Libres, por temor a una ocupación paraguaya en toda la costa del río Uruguay.

Con fecha 14 de Abril convoca a todos los correntinos, de entre diecisiete y sesenta años, a presentarse con caballo de tiro ante el Jefe de departamento correspondiente. Dispone, a la vez, conociendo y previendo la situación, que serán considerados traidores todos aquéllos que voluntariamente obedezcan las órdenes de los paraguayos₍₅₎.

(5) Periódico “La Nación Argentina”, del 24 de Abril de 1865. // Citado por el doctor Dardo Ramírez Braschi. Profesor Titular de “Historia Constitucional Argentina” de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales y Políticas (U.N.N.E.). Publicado en “Folia Histórica del Nordeste”. Instituto de Investigaciones Geohistóricas. CONICET.

Con respecto a la participación de los correntinos en la Guardia Nacional, no siempre fue concretada por todos los ciudadanos, debido a que un sector político de la Provincia adhirió indirecta y, a veces, directamente, a la causa paraguaya. En otras publicaciones ya se ha tratado detalladamente la cuestión, a las que nos remitimos₍₆₎.

(6) Dardo Ramírez Braschi. “La Guerra de la Triple Alianza a través de los Periódicos Correntinos. (1865-1870)”. Corrientes. Año 2000. // Citado por el doctor Dardo Ramírez Braschi. Profesor Titular de “Historia Constitucional Argentina” de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales y Políticas (U.N.N.E.). Publicado en “Folia Histórica del Nordeste”. Instituto de Investigaciones Geohistóricas. CONICET.

Ahora agregaremos un nuevo documento, no citado con anterioridad, que confirma también la participación y simpatía de algunos correntinos para con el Paraguay. El mismo, en su parte pertinente, dice lo siguiente:

“El año 1865, cuando invadía el Ejército paraguayo esta capital y el Norte de su campaña, los ciudadanos que sentían arder el sentimiento de la Patria en sus pechos emigraron hacia el sur de la provincia, abandonando familias e intereses y arrastrando las penalidades naturales de estos casos; pero, por desgracia, no todos los argentinos de estas regiones pensaron y obraron de esta manera, y muchos correntinos -ofuscados por el poder de López y olvidando indignamente los deberes inherentes a todo ciudadano- se pasaron a la causa del invasor abatiendo los ánimos de los pusilánimes con su insensata prédica y echando un horror eterno sobre sus nombres; donde esto acontecía más vergonzosamente era en los Departamentos de San Cosme e Itati”₍₇₎.

(7) Colección Zeballos. Carpeta 141 - N^ro. 12 (gentileza de Thomas Whigham. Departamento de Historia - Universidad de Georgia, Estados Unidos). // Citado por el doctor Dardo Ramírez Braschi. Profesor Titular de “Historia Constitucional Argentina” de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales y Políticas (U.N.N.E.). Publicado en “Folia Histórica del Nordeste”. Instituto de Investigaciones Geohistóricas. CONICET.

Esta manifestación pertenece a un Informe anónimo, identificado al pie del documento como “un argentino”, dirigida a Estanislao Zeballos, desde Corrientes, el 28 de Mayo de 1884, cuando éste se hallaba en la tarea de recopilar datos para escribir la historia de la Guerra del Paraguay, la que nunca llegó a concretarse completamente.

El avance y ocupación militar paraguayos proseguía, tomando el poblado de Empedrado como primera etapa, para proyectarse después por la costa del río Paraná hacia el Sur. Inmediatamente, tratando de improvisar y generar -aunque mas no fuera- una leve defensa y, sobre todo, para observar los movimientos del enemigo, el coronel Fermín Alsina fue designado Jefe de Vanguardia.

También fue nombrado Comandante en Jefe de Operaciones el coronel Raimundo I. Reguera, sumándose también el general Nicanor Cáceres, con tropas reclutadas de los Departamentos Curuzú Cuatiá y Sauce. Completando las filas correntinas en sus altos grados, estuvo también presente el coronel Manuel de Jesús Calvo, a cargo de la Jefatura del Estado Mayor de la Provincia.

El gobernador Lagraña se mostraba optimista porque, según sus cálculos, tendría aproximadamente 6.000 hombres -en las cercanías del Cuartel General de San Roque- para frenar el ataque, observando especial entusiasmo en todos por combatir.

El Informe de Lagraña sobre la motivación y participación de los correntinos no se ajusta a una total realidad ya que numerosos fueron los que se plegaron a las directivas paraguayas y a las órdenes de la Junta Gubernativa de la capital.

El mismo Lagraña, en diversas oportunidades, se referirá al tema, y en carta al vicepresidente Marcos Paz, fechada en Septiembre de 1865, hace referencia al combate de Naranjitos, comentando que los batallones de ambos lados participantes estaban integrados por correntinos. Con el mismo sentido transmite ese sentimiento de derrota y desánimo al hablar del citado combate, lo que fue transcripto en el Parte de batalla de aquel enfrentamiento.

El transcurrir de la guerra en los primeros meses dividió territorial y políticamente a la Provincia en dos sectores: por un lado, todo el territorio del Noroeste provincial dominado por tropas paraguayas, bajo las directivas de la Junta Gubernativa, que fuera elegida por el voto de los vecinos de la ciudad. Enfrente, el sector opositor, bajo la jurisdicción de Lagraña.

La línea divisoria aproximada de un sector territorial con el otro fue el río Santa Lucía , desde su nacimiento y hasta la desembocadura en el río Paraná, límite que no cruzó la mayoría de las tropas paraguayas, salvo algunas partidas de ataque y reconocimiento que lo pasaban esporádicamente.

Pero, a pesar de la divisoria de aquel río, esa línea nunca estuvo claramente definida, ni tampoco marcada una zona específica bajo la influencia de la Junta Gubernativa -por un lado-, y el Gobierno de Lagraña por el otro, y ello se debía a que los avances y retrocesos de las tropas de vanguardia de la caballería correntina también eran una constante.

Es así que en varios Departamentos, como San Miguel o Mburucuyá, ambas Administraciones nombraban autoridades y designaban Jueces de Paz. La primera reacción de Lagraña ante la noticia de la conformación de una Junta Gubernativa integrada en la Capital por correntinos, fue la de dictar -el 21 de Abril- un Decreto declarando nula la designación de toda autoridad e imputando de traidores a la patria a todos aquéllos que “obedezcan órdenes de dicha autoridad, o tomen las armas en su defensa, o le presten cualquier colaboración o ayuda”, de acuerdo a las disposiciones de la Constitución Nacional₍₈₎.

(8) Registro Oficial de la Provincia de Corrientes. 1865. pp. 56 y 57. // Citado por el doctor Dardo Ramírez Braschi. Profesor Titular de “Historia Constitucional Argentina” de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales y Políticas (U.N.N.E.). Publicado en “Folia Histórica del Nordeste”. Instituto de Investigaciones Geohistóricas. CONICET.

Los últimos días de Abril y los primeros de Mayo de 1865 fueron de importancia para la organización de las milicias, ya que se afianzó la organización de batallones de caballería, al mando del general Cáceres, los que -conjuntamente con las primeras tropas enviadas por el Gobierno nacional que desembarcaron en los poblados de Esquina y Goya- comenzaron a formar el primer gran frente de avance.

Las comunicaciones con el presidente Mitre, una vez instalado Lagraña en San Roque, se hacían a través de las postas terrestres que jalonaban el camino hasta Esquina y, de allí, en buque aguas abajo hasta Buenos Aires.

Las noticias informativas no sólo estaban dirigidas a Buenos Aires, o a los Jefes del Ejército nacional. Así, por ejemplo, en reiteradas oportunidades el general Cáceres informaba directamente al general Justo José de Urquiza, quien se hallaba en Entre Ríos. En una de esas misivas informó -el 23 de Mayo de 1865- sobre la situación del momento:

“El infrascripto se congratula de saber que V. E., según lo comunica en la citada comunicación, apresurara la marcha, pues no puedo ocultarle que la retirada que estas fuerzas han efectuado ante un enemigo numeroso, y los trabajos de los traidores que desgraciadamente abriga este suelo, han desmoralizado completamente los campos del Norte del río Corriente, que han sufrido una gran deserción”.

La figura de Urquiza nunca dejó de estar en el accionar de algunos hombres de la política de Corrientes, de sus aliados o sus adversarios políticos. A modo de ejemplo vale citar un incidente en el que el designado Jefe de la vanguardia correntina del río Uruguay, coronel Simeón Payba, había sido acusado por Lagraña de proceder por “cuestiones personales y por cuestiones de partido”₍₉₎, quedando aquél ofendido por las afirmaciones del primer mandatario.

(9) Archivo del general Mitre - Tomo II - Año 1911, p. 167. // Citado por el doctor Dardo Ramírez Braschi. Profesor Titular de “Historia Constitucional Argentina” de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales y Políticas (U.N.N.E.). Publicado en “Folia Histórica del Nordeste”. Instituto de Investigaciones Geohistóricas. CONICET.

El mismo Payba escribió informando de aquella situación a Urquiza. Las diferencias políticas y personales -a pesar de la guerra- estaban presentes. La afinidad política existente entre Cáceres y Urquiza estuvo manifestada permanentemente a través de la comunicación mutua, nacida de la confianza que se tenían ambos hombres, sin dejar de considerar la colaboración permanente que Cáceres brindó a Lagraña.

La participación de Cáceres tiene importancia porque era un hombre de gran influencia en la campaña del Sur correntino, y todos lo sabían, incluso los paraguayos.

Antes de la ocupación de Corrientes, un informante paraguayo escribió al ministro José Bergés sobre la política correntina y en particular el accionar de Cáceres en Enero de 1865. El citado informante decía:

“El general Cáceres, hablando con don Melitón Quirós respecto a la guerra entre el Paraguay y el Brasil, dijo que lo miraba en mucho peligro al Paraguay, porque el Brasil era una potencia fuerte. El mismo Cáceres, hablando con Silvero, afirmó lo contrario ... Esta mañana salió de regreso a su estancia “Paraíso” el general Cáceres, quedando muy bien con los dos partidos políticos. Con el gobernador anduvo de paseo todas las tardes, mientras su presencia en ésta"₍₁₀₎.

(10) Informe de Miguel Rojas a José Bergés, fechado en Corrientes, el 7 de Enero de 1865. Archivo Nacional de Asunción - Colección Río Branco I-29;29;17; N^ro. 1-3 (gentileza de Thomas Whigham // Departamento de Historia - Universided de Georgia, Estados Unidos). // Citado por el doctor Dardo Ramírez Braschi. Profesor Titular de “Historia Constitucional Argentina” de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales y Políticas (U.N.N.E.). Publicado en “Folia Histórica del Nordeste”. Instituto de Investigaciones Geohistóricas. CONICET.

Esta posición ambivalente de Cáceres fue definida tiempo después, ya que durante la ocupación paraguaya participó activa y conjuntamente con el gobernador Lagraña. La influencia de Cáceres en los Departamentos del Sur provincial fue tal, que la Junta Gubernativa nombró, a fines de Abril de 1865, a una Comisión de conocidos vecinos para que parlamentaran y lo convencieran de los beneficios de la política paraguaya en el Plata.

La misión no tuvo ningún éxito, porque Cáceres y los demás oficiales repudiaron a la Junta Gubernativa en todo momento, y a los vecinos de la capital que formaban aquella Comisión los hicieron regresar sin logro alguno.

No se describen aquí los movimientos y el traslado de las columnas del Ejército paraguayo por territorio correntino, porque no es la finalidad de este estudio y porque además ya se han realizado al respecto extensas investigaciones desde el campo militar₍₁₁₎.

(11) Juan Beverina. “La Guerra del Paraguay” - Tomos I al V // Buenos Aires, Año 1921. // Citado por el doctor Dardo Ramírez Braschi. Profesor Titular de “Historia Constitucional Argentina” de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales y Políticas (U.N.N.E.). Publicado en “Folia Histórica del Nordeste”. Instituto de Investigaciones Geohistóricas. CONICET.

Pero, sí se hará referencia a algunos datos aún desconocidos. Las tropas de ocupación paraguayas estuvieron en permanente movimiento, ocupando diversos establecimientos rurales situados en los Departamentos que estaban bajo su influencia.

Por ejemplo, uno de aquellos casos significó el vaciamiento y destrucción del establecimiento rural propiedad de Domingo Latorre, ubicado en Sombrero Grande, en el antiguo Departamento Lomas, hecho que lo conocemos por un expediente de reclamo de indemnización presentado ante los Tribunales de Corrientes en 1866, para dejar legal constancia de los daños sufridos, entre los que figuraban el saqueo de la casa, la incautación de más de 500 cabezas de ganado y la pérdida de toda la cosecha de naranjas de aquel año, que se calculaba en 3.000.000 de frutas₍₁₂₎.

(12) Archivo privado de Eulogio Cruz Márquez (Corrientes). // Citado por el doctor Dardo Ramírez Braschi. Profesor Titular de “Historia Constitucional Argentina” de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales y Políticas (U.N.N.E.). Publicado en “Folia Histórica del Nordeste”. Instituto de Investigaciones Geohistóricas. CONICET.

El Gobierno de Lagraña y las tropas de vanguardia nada pudieron hacer acerca del accionar de las tropas paraguayas, ya que no podían oponerse abiertamente -por la ventaja numérica en hombres del enemigo-, pero, a pesar de la amenaza del avance paraguayo, se mantuvieron firmes en los Departamentos no ocupados, manteniendo y garantizando la Administración política del Gobierno correntino.

Así, por ejemplo, continuaron en funciones los Jefes políticos de Goya y Bella Vista, Evaristo López y Francisco Ferreyra, respectivamente. Lo mismo hicieron los Jueces de Paz en cada jurisdicción departamental.

En los primeros días de Agosto se produce la ocupación del poblado de Bella Vista. En un Informe de Lagraña al vicepresidente Marcos Paz, denuncia la gravedad de los hechos producidos por integrantes de las tropas paraguayas, ocasionando destrozos casi totales, incluyendo el saqueo del templo del pueblo₍₁₃₎.

(13) Archivo del coronel Marcos Paz. Tomo IV // Universidad Nacional de La Plata, La Plata - Año 1963, p. 83. // Citado por el doctor Dardo Ramírez Braschi. Profesor Titular de “Historia Constitucional Argentina” de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales y Políticas (U.N.N.E.). Publicado en “Folia Histórica del Nordeste”. Instituto de Investigaciones Geohistóricas. CONICET.

El ataque paraguayo a Bella Vista, según correspondencia y testimonios, fue uno de los más violentos de toda la ocupación paraguaya. Uno de los relatos descriptivos del hecho se publicó en una serie de seis artículos escritos por Augusto Scotto y publicado en el diario “El Liberal”, de Corrientes, del 20 al 26 de Enero de 1925.

A esta altura de los acontecimientos, el gobernador Lagraña -por razones de seguridad- ya había abandonado San Roque y se había instalado en el Cuartel General ubicado en Esquina, poblado que se hallaba protegido por su salida al río Paraná y por la cercanía a Entre Ríos.

En este punto se instaló la imprenta del periódico “La Esperanza”, que se editaba en Goya, traída por su editor₍₁₄₎ pero, al poco tiempo, más precisamente el 7 de Junio, los paraguayos se retiraron y abandonaron las cercanías de Goya. Lagraña pasa entonces de Esquina a Maruchas (en el Departamento Goya) y, desde allí al pueblo de Goya y fija su nueva sede provisoria de Gobierno, cuya característica principal fue la de coordinar los suministros y mercaderías que requerían las tropas para su abastecimiento.

(14) Archivo del general Mitre - Tomo II, Año 1911, p. 170. // Citado por el doctor Dardo Ramírez Braschi. Profesor Titular de “Historia Constitucional Argentina” de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales y Políticas (U.N.N.E.). Publicado en “Folia Histórica del Nordeste”. Instituto de Investigaciones Geohistóricas. CONICET.

El ciento por ciento de la política de gobierno estaba relacionada a la ocupación paraguaya y a la guerra. La necesidad de acercar caballos y ganado para el consumo se reflejaban en los reclamos de Lagraña, pero había Jefes militares que proponían que todo aprovisionamiento para las tropas se debía hacer entre militares solamente.

Así fue que Wenceslao Paunero, en carta al vicepresidente Paz, sostuviera la conveniencia de separar a Lagraña del aprovisionamiento del Ejército, diciéndolo de la siguiente manera:

“... estos artículos deben depositarse a bordo de la goleta de guerra ‘Argos’, a disposición del Gefe de Vanguardia, quien debe entenderse directamente con algún Gefe Militar caracterizado que puede contratar carretas, bueyes y atender como es debido a esas exigencias, ya V. comprende con qué fin, que es el que los militares se basten propios”₍₁₅₎.

(15) Archivo del coronel Marcos Paz - Tomo IV // Universidad Nacional de La Plata, La Plata - Año 1963, p. 52. // Citado por el doctor Dardo Ramírez Braschi. Profesor Titular de “Historia Constitucional Argentina” de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales y Políticas (U.N.N.E.). Publicado en “Folia Histórica del Nordeste”. Instituto de Investigaciones Geohistóricas. CONICET.

Antes que el Gobierno nacional hiciese los contratos de aprovisionamiento con los proveedores -durante los meses de ocupación paraguaya- las tropas correntinas fueron abastecidas con ganado vacuno de la zona y sus propietarios debían cambiarlo por vales firmados por la autoridad militar que lo recibía y, a partir de Agosto de 1865, debían ser visados por el gobernador₍₁₆₎.

(16) Ocupación de Corrientes por tropas paraguayas (1865). Corrientes, Imprenta del Estado. // Año 1929, p. 40. // Citado por el doctor Dardo Ramírez Braschi. Profesor Titular de “Historia Constitucional Argentina” de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales y Políticas (U.N.N.E.). Publicado en “Folia Histórica del Nordeste”. Instituto de Investigaciones Geohistóricas. CONICET.

Los propietarios de esos vales debían cobrárselos al Gobierno nacional posteriormente. La estadía de Lagraña en Goya no tiene una duración prolongada por el temor a un ataque, por lo tanto se ubicó -a mediados del mes de Agosto- en Curuzú Cuatiá para “así que Goya deje de ser amenazada por el enemigo, regresaré a aquel punto que es el más conveniente para mi permanencia”₍₁₇₎.

(17) Archivo del coronel Marcos Paz - Tomo IV. // Universidad Nacional de La Plata, La Plata (provincia de Buenos Aires) - Año 1963, p. 128. Carta de Manuel I. Lagraña a Marcos Paz, del 31 de Agosto de 1865. // Citado por el doctor Dardo Ramírez Braschi. Profesor Titular de “Historia Constitucional Argentina” de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales y Políticas (U.N.N.E.). Publicado en “Folia Histórica del Nordeste”. Instituto de Investigaciones Geohistóricas. CONICET.

Permaneció en Curuzú Cuatiá durante todo el mes de Septiembre. A raíz de la guerra, los recursos propios del Gobierno provincial no existieron, recurriendo permanentemente al apoyo económico y subvención extraordinaria de la Administración nacional. Ni siquiera podía cubrir los Gastos mínimos de la Administración local₍₁₈₎.

(18) Archivo del coronel Marcos Paz - Tomo IV. // Universidad Nacional de La Plata, La Plata (provincia de Buenos Aires) - Año 1963, p. 197. Carta de Manuel I. Lagraña a Marcos Paz, del 28 de Septiembre de 1865, pp. 58 y 59. // Citado por el doctor Dardo Ramírez Braschi. Profesor Titular de “Historia Constitucional Argentina” de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales y Políticas (U.N.N.E.). Publicado en “Folia Histórica del Nordeste”. Instituto de Investigaciones Geohistóricas. CONICET.

Desde el mes de Abril a Octubre de 1865, la sede del Gobierno de Lagraña tuvo carácter ambulante; en un principio se ubicó en Empedrado, luego en San Roque, para pasar el poblado de Esquina y de allí a Goya y, posteriormente, a Curuzú Cuatiá, pasando por Bella Vista, para volver definitivamente a la Ciudad de San Juan de Vera los primeros días de Noviembre de 1865.

La peligrosidad de los acontecimientos bélicos exigieron el permanente movimiento del gobernador Lagraña junto a un pequeño grupo de colaboradores. La radicación definitiva en la Capital provincial se consolidó con el abandono de las tropas paraguayas del territorio correntino.

Una vez ubicado nuevamente en la capital, reestructurará la Administración de su Gobierno designando nuevas autoridades en diversos cargos. Así, por ejemplo, nombra Juez de primera instancia en lo Criminal a Pastor S. Obligado; Fiscal General interino a Emilio Cabral; y Contador de la Provincia, a Valentin Virasoro. Nombró también inmediatamente en los cargos vacantes de Policía y Seguridad₍₁₉₎.

(19) Registro Oficial de la Provincia de Corrientes, Año 1865, pp. 58 y 59.  // Citado por el doctor Dardo Ramírez Braschi. Profesor Titular de “Historia Constitucional Argentina” de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales y Políticas (U.N.N.E.). Publicado en “Folia Histórica del Nordeste”. Instituto de Investigaciones Geohistóricas. CONICET.

Como a fines de 1865 expiraba el período de gobierno, se convocó a elecciones para el 11 de Diciembre con el fin de elegir electores para gobernador y vicegobernador.

Las elecciones se cumplieron en legal forma y el 25 de Diciembre fue electo el nuevo gobernador, el goyano Evaristo López y, como vicegobernador a Juan Vicente Pampín, quien renunció y fue reemplazado por José Ramón Vidal.

- Conclusión

Del análisis y estudio de los meses de 1865 en los cuales el Gobierno de Lagraña no residió en la capital correntina, se pueden afirmar algunas conclusiones puntuales:

1.- La provincia de Corrientes, con la ocupación paraguaya y con la elección de la Junta Gubernativa, dividió literalmente al territorio, ya que quedaron perfectamente marcadas -en aquellos meses- las posturas políticas que habían adoptado los correntinos, ya sea simpatizando con los paraguayos o con el Gobierno de Lagraña.

2.- Una vez retirado Lagraña de la Ciudad de San Juan de Vera, su sede gubernativa o capital provisoria no sólo fue el pueblo de San Roque -como generalmente se cree- sino que se ubicó también en Empedrado, Esquina, Goya, Curuzú Cuatiá y Bella Vista. Podemos considerar a todos estos puntos como sedes transitorias, ya que de cada una de ellas se emanaron disposiciones oficiales de gobierno.

De los siete meses, aproximadamente, que Lagraña no gobernó desde la ciudad capital, se sabe que desde San Roque sólo lo hizo los últimos días de Abril y el mes de Mayo de 1865.

3.- Se disolvió de hecho la Legislatura, y todas las disposiciones fueron tomadas directamente por el Poder Ejecutivo.

4.- Durante el tiempo que duró la ocupación paraguaya, la jurisdicción efectiva sobre una vasta zona del territorio provincial estuvo dividida en dos y, en varias ocasiones, en algunos Departamentos en disputa existían indistintamente autoridades locales designadas tanto por la Junta Gubernativa como por el gobernador Lagraña.

5.- El Gobierno de Lagraña fue un engranaje indispensable en el intento de contención del avance paraguayo por la costa del Paraná, ya que organizó los primeros batallones y estructuró una Jefatura de mandos militares con los oficiales correntinos, constituyéndose estos en vanguardia de lo que sería -meses posteriores- la movilización del grueso del Ejército argentino.

- Bibliografía consultada por el autor

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- Maeder, Ernesto J. A. y Gutiérrez, Ramón. “Atlas Histórico del Nordeste Argentino”. Impresiones de la Universidad Nacional del Nordeste. Año 1995. Resistencia (Chaco).
- Méndez Paz, Emilio. “Periódicos correntinos. 1825-1900”. Buenos Aires. Año 1953.
- Pomer, León. “Conflictos en la Cuenca del Plata en el siglo XIX”. Ed. Riesa. Buenos Aires. Año 1984.
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- Ramírez Braschi, Dardo. “Evaristo López, un gobernador federal. Corrientes en tiempos de la guerra de la Triple Alianza”. Corrientes. Año 1997.
- Ramírez Braschi, Dardo. “La guerra de la Triple Alianza a través de los periódicos correntinos. (1865-1870)”. Corrientes. Año 2000.

- Rebaudi, A. “Guerra del Paraguay”. Imprenta Constancia. Buenos Aires. Año 1917.
- Resquín, Francisco I. “La Guerra del Paraguay contra la Triple Alianza”. Ed. El Lector. Asunción (Paraguay). Año 1996.
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- Whigham, Thomas. “Paraguay, Corrientes y la política fluvial”. Ed. El Lector. Asunción (Paraguay). Año 1999.
- Zjarks, Germán O. E. “Nueva luz sobre el origen de la Triple Alianza”. Revista Historia, número 1 - Octubre-Diciembre 1977. Buenos Aires.

* Publicaciones Oficiales:
- Registro Oficial de la Provincia de Corrientes. Años 1864 a 1865.
- Ocupación de Corrientes por Fuerzas Paraguayas (1865). Imprenta del Estado. Corrientes. Año 1929.

* Periódicos:
- Hemeroteca del Archivo General de la Provincia de Corrientes.
- Periódico “El Progreso”, de Corrientes, de los años 1864 y 1865.
- Periódico “El Independiente”, de Corrientes, de los años 1864 y 1865.
- Periódico “La Esperanza”, de Corrientes, de los años 1865 a 1870.
- Diario “Nación Argentina”, de Buenos Aires. Año 1865.

* Documentos inéditos:
-- Archivo General de la Provincia de Corrientes:
- Sección Correspondencia Oficial. Años 1864 a 1870.
- Sección Copiadores de Notas del Ministerio de Gobierno. Años 1864 a 1866.
- Sección Expedientes Administrativos. Años 1864 a 1866.
- Sección Expedientes Judiciales. Años 1864 a 1866.
- Fondo Mantilla.
- Fondo Vedia Mitre. Tomos I y II. Años 1865-1870.
- Sección Protocolos. Sala 3. Tomos 488, 489, 490 y 491.